Un dorama japonés extraordinario. Aborda temas complicados como el bullying y la evidente brecha social que las escuelas suelen crear; los becados y los chicos no-cool contra los hijos de multimillonarias firmas. Los profesores son unos asafjfakjfhkajhfk –no valen ni la pena- les importa tan poco que les pasa a sus alumnos, pero eso justamente es lo que encanta de este dorama.
Sin embargo, lo importante es ver como nuestra pequeña prota se topa con el mismo “emperador” para modificar las leyes no-escritas de su escuela; mientras todos los problemas se dan, ella tiene que cambiar su forma de pensar y reaccionar. Parece un animalito cuando se asusta. No siempre puedes ser parte de la manada, a veces debes crear la tuya para sobrevivir.
Tsubame (nuestra prota) es una niña humilde, inocente, bastante tonta, pero, sobre todo, débil. Sin entender bien porqué ha sido elegida como presidenta del consejo estudiantil, en su inocencia cree que es bueno–pobre inocente-. Resulta que ella no tendrá ni voz, ni voto, todo lo que haga el consejo es por orden de 8 tipos y tipas muy chulos. Algo tan sencillo como ir en bus de la escuela, sentarte donde quieras, comer lo que desees, ser escuchado por tu profesor, tener una vida feliz en la escuela, son cosas casi imposibles para esta chica…
Pero tranquilos, la pequeña Tsubame no estará sola en sus batallas contra la sociedad estudiantil, tendrá a 6 amigos –un grupo de desadaptados-; y un peculiar chico, Kei Shizukui, que le ira enseñando como luchar en ese ambiente.
Cheka esta historia que tiene un sabor diferente y maduro.
Posdt. Amo a Kei y su maldita –y enferma- personalidad xD
