Todo el reino sabía sobre El Jardín de Flores Rojas, era el jardín de los bethas. Una subraza entrenada para servir, a pesar de no nacer con ninguna habilidad especial sabían explotar sus diferentes atributos. Algunos de estos bethas habían podido llegar a cargos importantes e incluso otros eran sirvientes de la Familia Real, pero también era muy conocido que su mayor fidelidad se encontraba con su casa y con el líder de la misma, el actual líder era un joven llamado Nek.
- Tu madre dejo dicho que usted sería mi amo -el joven le hablaba de forma tan pausada mientras acomodaba al Príncipe Omega en su cama
- ¿Mi madre? -Az no solía escuchar nada de su madre y ahora había un betha en su habitación hablándole y presentándose como el líder de la casa de los bethas y a esto debía sumarle que le decía «amo»
- Comprendo su sorpresa, para mi también lo fue, pero al parecer su madre pago por mí al anterior líder, mi tío -comenzó a buscar entre sus ropas, muy finas por lo cierto- ¿Quizás desea ver el contrato? o quizás se siente más tranquilo si le muestro mi título, un segundo… lo he traído.
Az no sentía miedo y las dudas se fueron disipando cuando vio los documentos, su madre sí había formado un contrato con la casa de los bethas. Ella había pagado por el siguiente sucesor, esperando que fuera hombre exigía que este fuera su sirviente y fuera entrenado en las diferentes artes de defensa y política. Dos habilidades que eran muy necesarias para sobrevivir en el ambiente real y las cuales no habían sido dadas a Az por su raza.
- ¿Puedes hacer algo con ese olor? -Az había comenzado a sentir como le ardía la nariz por dentro
- Lo lamento -el sirviente se movió y abrió las ventanas de la habitación- es una aroma especial que desprendemos algunos, lo usamos para cubrir el aroma de los omegas en celo
- Nunca había escuchado de algo así… -Az no había escuchado sobre tal aroma y sobre todo en un simple betha
- Es un aroma que solo posee el líder de casa. El olor puede ser confundido con un aroma a flores, pero realmente confunde y pica a los omegas y a los alfas los marea y desmaya en algunas ocasiones. Puede ser muy útil para usted…
- Ya entiendo el porqué mi madre pidió al líder de casa, aunque has llegado un poco tarde… llevo dos años desde mi primer celo.
- Lo sé, lamento mi tardanza, pero recién he asumido el liderazgo en la casa…
Con la llegada de Nek la vida de Az tomo otro rumbo. Él mantenía a los alfas alejados, pero ambos sabían que ningún omega puede vivir sin sexo y solo cuando era necesario Nek suprimía su aroma y se alejaba de Az para que este pudiera atraer a un alfa. Lo que Az desconocía es que Nek solo permitía que alfas «amables» se aparearan con él, para que no volviera a sufrir como con sus hermanos. Pero nada podía durar demasiado, sus hermanos habían comenzado a sospechar que había alguien que ayudaba a Az con sus necesidades.
Una vez a la semana los hermanos tenían que sentarse a la mesa para almorzar junto y leer las noticias de su padres, esos almuerzos solían salir bien si Az no hacía notar su presencia, pero aquel día se le resbalo la copa de vino. Todos lo tomaron como parte de su desgracia, solo Nek se percato de sus mejillas rojas y sudor que caía de su frente, su celo estaba llegando.
- ¡Perro estúpido! -grito Adair- ¡Si deseas ser violado por todos solo debes decirlo! ¡Eres tan asqueroso como tu madre!
- ¡¡Todos usen su bozal!! -Ahora era Axa el fastidiado
Todos los guardias y sirvientes alfas presentes tuvieron que hacer caso y ponerse los bozales que impedían que perdieran el control y mordieran al Príncipe Omega durante sus celos, pero nada de eso usaban sus hermanos.
- Ay, hermanito… -Mika se había levantado y acercado a Az- si deseas ser violado, solo pídelo, llevo meses sin tomar a un omega que resista…
Nek pudo ver el temblor en las manos de Az, su amo estaba incomodo y no podía permitir aquella situación
- Príncipe Mika -se interpuso entre su amo y el príncipe- le debo pedir que no toque a mi amo con tanta familiaridad, sobre todo en estos momentos que él no tiene control sobre si mismo…
Todos los alfas lo sintieron, un aroma a flores en el ambiente invadía sus sentidos, algunos comenzaron a sentir arcadas desde la boca del estomago y a otros se les iba nublando la vista, pero a los hermanos reales solo los comenzaba a marear. El aroma era tan intenso que uno a uno de los sirvientes terminó en el piso, pero Adair detecto de dónde venía aquel aroma…
- ¡Tú! -señalaba a Az- ¡Adoptaste a un betha de jardín!
- Sí… -Az sonreía
Fue la primera vez que los hermanos se sintieron menos que su hermano omega, no aguantaban el aroma y necesitaban salir rápido antes de perder el conocimiento, pero el betha se adelanto y tomo a su amo en brazos y salio del salón, todo el castillo apestaba a flores y todos los alfas habían ido a la enfermería con los mismo síntomas…
Mientras en la habitación de Az, Nek preparaba la bañera para que se le baje los calores a su amo y había mandado a traer a un betha del jardín para el apareo. Az estaba satisfecho de ver a sus hermanos tan debiles y pequeños frente a él, o bueno, frente a la habilidad de Nek…
- ¿Esto era lo que quería mi madre, no?
- Ella quería muchas cosas para usted, y yo solo seré la herramienta para eso… amo
- Quiero saberlo todo, enséñame todo…
- Lo haré, ahora entre a la tina ya está por venir el joven…
- gracias..