Me encanta la historia. Laura Kinsale escribe de una manera muuuuuuy rica –excesiva- les mete una descripción tan detallada a las situaciones que en algunas escenas –las calientes- terminas mordiéndote el labio, pero en otras… cooofff… estás leyendo una epopeya. Soy más lectora de la descripción física y psicológica del personaje. ¡Pero la historia es buena!
Elena tiene una personalidad encantadora, parece santa peroooo ¡NO! Tiene toda una mujer dentro que desea hervir en las manos de su amado. Ciertas situaciones la llevan a viajar en un barco a conocer a –el que sería- su esposo, pero unos piratas la terminan llevando a una isla y conoce al Cuervo, un ángel caído desde el mismo cielo para ensuciarse en la tierra de los mortales, o eso pienso yo.
Allegreto, o Cuervo, tiene un pasado muy interesante con Elena, y lo que inicia como la más ardiente de las venganzas se vuelven la más candente de las pasiones. La historia entreteje muchas situaciones y lugares, nombres, cargos, diálogos importantes, total… sumamente interesante y envolvente. Esta historia cumple lo más importante -para mí- en una relación de protagonistas debe existir el sentido, inicia con algo, crece, sufre, evoluciona y poco a poco se vuelve algo más estable… no como otras novelas que presentan al “príncipe” y por cliché sabes que se amarán, no, aquí todo guarda un sentido y razón.
Allegreto, bueno… ¡ME ENCIENDE! Que hombre, que carácter, que fascinación, y que intelecto. Es un personaje sublime y exitante, desde sus diálogos hasta la forma en que se muestra resulta encantador. Tiene sus secretos y sus traumas, admite sus pecados y aunque está en la oscuridad no le desea eso a sus seres queridos, pero está dispuesto a ensuciar sus manos y luchar en el mismo infierno si debe tomar venganza.
Elena es más bien una protagonista muy sensata y luchadora. No es delicada, ni pura –menos después de conocer al Cuervo- comete algunos disparates que te hacen decir en medio de la lectura ¡PEROOO QUE ESTÚPIDA!, pero en lo demás es bastante tranqui e intenta hacer el menor daño posible.
– Allegreto -susurró ella mirándolo a los ojos-. Os amo.
– Mi corazón está encadenado, mi gata salvaje -replicó él. La sujetó contra su pecho, las manos enredadas en su cabello-. Si lo tuviera.
Contratapa
Lady Elena disfruta de una vida tranquila en la campiña inglesa hasta que es obligada a viajar al principado italiano de Monterverde, del cual ella es la única heredera. Allí la espera un deber implícito con la posesión de las tierras: casarse con el gobernador. Sin embargo, durante la travesía los piratas abordan el barco en el que viaja y cae en mano del temido Allegreto Navona.
Para el pirata, Lady Elena será una perfecta arma de venganza y una herramienta idónea para conseguir su objetivo, ya que es pretendiente a la soberanía del principado y enemigo mortal del gobernador actual.